Hay datos sobre este molino de finales del siglo XIX. En 1927 sus aguas se cogieron para abastecer el pueblo de Bergara. En 1929 el señor Valentín Movilla Fernández en representación de la sociedad “Sobrino de Fernández y Cía” con intenciones de lograr energía eléctrica en Bolua hace una petición para inscribirse en el registro de aprovechamiento de aguas públicas, siendo el caudal a utilizar 60 litros por segundo y el salto útil de agua de 4,5 m. En 1931 se convirtió en molino de harina público. En 1944 también paga una cuota por ser panadería. Tenía una pareja de piedras que se movía con dos rodetes de hierro. También lograba energía eléctrica para la casa. Hasta 1974 molió granos y su maquinaria esta guardada. En los últimos años también se le instaló un alternador con el fin de poducir energía eléctrica para el alumbrado público de alrededor.